sábado, 18 de junio de 2011

Qué pena

 

Así se llama la canción de Víctor Manuel, hoy por casualidad sonó y quise transcribirla y animarle a quien pase por aquí para que la busque. Es triste, aún así, tiene su encanto.

Qué pena

¡Qué pena!
que yo no pueda ser un guerrillero
para saber cien modos
como invadir tu cuerpo.
Que yo no pueda ser un guerrillero.
¡Qué pena!!
Que yo no pueda ser el viento
para escapar muy lejos
enredado en tu pelo.
Que yo no pueda ser el viento.
¡Qué pena!
que yo no pueda ser un verso
o ser tu jardinero
o ser tu mismo cuerpo.
Que yo no pueda ser un verso.
¡Qué pena!
que yo no pueda ser tu perro
y comer de tu mano
para tener un dueño.
Que yo no pueda ser tu perro.